Boletín 12: Cumbre del Clima en Bonn. 21-11-2017 Ver más

Por Hernán Carlino,
Especialista en Política Climática

Esta COP 23 de Fiyi, en Bonn, ha exhibido, con notable nitidez, esa doble condición de espacio de negociación gubernamental en el marco de la Convención Marco de Cambio Climático y, a la vez, de caja de resonancia global de la acción climática que llevan a cabo un amplísimo número de actores estatales y no estatales.

Esa combinación transformó a la COP 23 en una cumbre del clima, donde latió el pulso de la acción y, en simultáneo, avanzó la construcción laboriosa de un régimen de gobernanza climática global.

La acción climática que se difunde, aunque multifacética y, en cierto modo, descentralizada, se despliega y articula en torno de unos vectores de transformación principales:

- Las iniciativas regionales y locales

 - Las acciones corporativas

 - La renovación en los sistemas financieros

En cuanto a las iniciativas regionales y locales, se incluyen entre ellas las que se impulsan a nivel sub-nacional –estados o provincias, según la organización del estado nacional-, en las ciudades y en el ámbito local.

Para consolidar una parte de ese empuje, el 12 de noviembre se adoptó el Compromiso de Bonn-Fiyi, de líderes locales y regionales, con el propósito de concretar el Acuerdo de París en todos los niveles. Ese compromiso, del que participaron más de 330 líderes políticos y más de 1000 delegados, y que comprende 19 iniciativas diferentes, constituyó el resultado formal de la Cumbre de Líderes Locales y Regionales.

Entre las iniciativas que hicieron parte del compromiso adoptado se incluye, por ejemplo, la Alianza Global de Alcaldes para el Clima y la Energía, una vasta coalición de más de 7400 ciudades en 121 países.

Las razones para este énfasis en los espacios urbanos son claras: más de la mitad de la población vive en ciudades y se espera que esa distribución se acerque a casi dos tercios del total hacia 2050. Las ciudades son, además, responsables de aproximadamente el 70 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero provenientes de la quema de combustibles fósiles para la energía y el transporte. Por contraste, un 13 por ciento de la población urbana mundial vive en áreas costeras bajas y por ende vulnerables, mientras que, según algunas estimaciones, alrededor del 80 por ciento de los costos de adaptación son necesarios para la adaptación de las áreas urbanas.

De modo que el potencial para la acción es enorme. Por ejemplo, el denominado Carbonn Climate Registry incluye a 1019 entidades en 86 países que representan al 9 por ciento de la población mundial y hace parte de una plataforma de reporte global para ciudades, poblaciones y regiones que se proponen hacer frente al cambio climático. Fue creado para dar apoyo a la transparencia en la acción y la credibilidad y para dar cuenta de los esfuerzos. Mediante esta iniciativa se llevan ya registradas más de 7000 acciones de mitigación que comprometen reducciones de unas 5.6 gigatoneladas de gases de efecto invernadero hacia el 2020. También se registran allí acciones de adaptación.

El Compromiso de Bonn-Fiyi está orientado, además, a propulsar el desarrollo urbano sostenible en línea con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y, en particular, el Objetivo 11 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que está dirigido a hacer que las ciudades y los asentamientos urbanos en general sean seguros, resilientes, inclusivos y sostenibles.

Sin embargo, uno de los obstáculos para la acción es el difícil acceso al financiamiento para las ciudades, para lo cual es necesario reforzar los mecanismos de coordinación entre los distintos niveles de gobierno, nacional, regional y local. Es preciso desarrollar un marco de cooperación que haga posible priorizar acciones, asignar recursos y evaluar resultados, teniendo en consideración también necesidades territoriales, el desarrollo regional equilibrado y, en muchos casos, la vulnerabilidad de la población urbana a eventos extremos. Para ello también es preciso desarrollar un portafolio de proyectos que puedan ser atractivos para los inversores, a la luz de nuevos principios y criterios de financiamiento verde, sostenibilidad y responsabilidad social.

Estas notas son elaboradas con la consideración de distintas fuentes, entre ellas los comunicados de prensa de UN Climate Press, los boletines del SDG Knowledge Hub, y los reportes del Earth Negotiation Bulletin, Third World Network, y ECO Newsletters de CAN International, así como con el seguimiento de las sesiones.

[1] UN Habitat. Wordl Cities Report. 2016.

[2] Idem.

[3] Urban Climate Change Research Network (UCCRN) (2015). Climate Change and CitiesSecond Assessment Report of theUrban Climate Change Research Network. Summary for City leaders