Regístrate

Energía Solar Fotovoltaica

Beneficios de la Tecnología Fotovoltaica


Por Esmeralda Pita jiménez
Moderadora de la Comunidad de Práctica de Energía Solar Fotovoltaica

 

Dando continuidad a los aspectos relevantes en el área de tecnología fotovoltaica (FV), este mes presentamos un extracto de los beneficios que el uso de esta tecnología puede significar para Centroamérica y El Caribe.

La tecnología fotovoltaica es una tecnología para suministro eléctrico que representa un área de oportunidad, creciente en beneficios para nuestras sociedades. Los impactos potenciales de una expansión a gran escala en el balance energético de una nación, o bien la modesta pero significativa participación en el entorno de una pequeña comunidad rural, requiere de una completa y correcta valoración beneficio-costo de la tecnología FV.

Si bien esta tecnología todavía posee un costo elevado de inversión y su carácter intrínsecamente intermitente hace que se develen nuevos retos de planeación eléctrica para su integración masiva a la red, es un hecho incontrovertible que los beneficios que puede aportar son numerosos y de alto peso específico. Consideremos en una visión somera los siguientes beneficios de la utilización de la tecnología FV:

Seguridad energética. Al desplazarse el consumo de combustibles fósiles, se induce automáticamente una menor dependencia sobre el uso de estos recursos, y por ende, una mayor diversificación energética. Al disponer de capacidades FV instaladas de magnitud importante, se disminuyen notablemente los riesgos-nación que induce la volatilidad de precios de los energéticos convencionales. Además, en los países ubicados en el cinturón del sol, el recurso solar es simplemente abundante.

Seguridad del suministro eléctrico. Al crecer en capacidad instalada, la generación FV se produce en instalaciones dispersas a lo largo y ancho de una región. Este ‘aislamiento’ de las fuentes de generación tiene un efecto benéfico en el suministro eléctrico al disminuir el riesgo de interrupciones y apagones.

Beneficios ambientales. La disminución en el consumo de combustibles fósiles produce una reducción directa en las emisiones de gases contaminantes, en especial, los de efecto invernadero. Por este hecho se provoca de manera directa una disminución de costos en tratamiento de gases contaminantes, y de manera indirecta -por un efecto colateral-, la reducción de costos asociados con catástrofes derivadas del cambio climático.

Sustentabilidad energética. La energía solar es un recurso prácticamente inagotable y completamente libre de costo. De forma preclara la inversión energética que se hace en una instalación FV para el aprovechamiento de la energía solar, se recupera en términos netos en unos cuantos años. A largo plazo, la generación FV se convierte en un producto neto de energía.

Beneficios económicos. En muchos casos, la tecnología FV es económicamente competitiva. Por ejemplo, al compararse el costo de producción eléctrica por este medio, contra el de una planta diesel en una comunidad apartada. Considerando el medio urbano, cuando se tienen altos consumos eléctricos y el régimen tarifario es elevado, se presenta la posibilidad de lograr una recuperación neta de la inversión. En este sentido, la generación distribuida FV reduce las pérdidas técnicas de transmisión y distribución, y puede diferir inversiones en la expansión o reforzamiento de la red eléctrica.

Beneficios sociales. Cuando se expande la tecnología FV en una región, se forman nichos de mercado que requieren ser atendidos por la propia comunidad, tanto en mano de obra para servicio, como en mano de obra para manufactura local de componentes. La creación de una cadena de valor FV -local o regional-, tiene un efecto de derrame positivo sobre las economías abriendo oportunidades de empleos verdes, capacitación y desarrollo.

, , , , , , , , , , , , ,

Actualizado por última vez el hace 1743 días por Eugenia Magnasco