Según un análisis presentado en el reporte de Síntesis de la CMNUCC Ver más
Por Hernán Carlino
Especialista en Política Climática
Investigador del Centro de Estudios en Cambio Climático Global - FTDT
Un análisis de las contribuciones determinadas nacionalmente (INDC), presentadas a pocos días de la COP 21, indica que los esfuerzos de mitigación propuestos por los países comienzan a producir un recorte significativo en el crecimiento de las emisiones globales.
Este análisis, denominado en la versión en inglés hecha pública inicialmente “Synthesis report on the aggregate effect of the intended nationally determined contributions” fue difundido el 30 de octubre por la Secretaría Ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
El informe de síntesis concluye, además, que las emisiones globales per cápita, considerando las INDC presentadas declinaran entre un 8 por ciento y un 4 por ciento hacia el 2025 y entre un 9 por ciento y un 5 por ciento en el 2030, si se las compara con los niveles de 1990 y 2010, respectivamente.
Sin embargo, del análisis surge también que los esfuerzos que se proponen llevar a cabo los países para mitigar el calentamiento global son aún insuficientes.
Así, si las contribuciones recibidas fueran implementadas plenamente, se estima que resultarían en un nivel agregado de emisiones globales de 55,2 GtCO2e en el 2025 y un 56,7 Gt CO2e en el 2030, manteniéndose la brecha de emisiones.
Es decir, habría emisiones en exceso de lo que es consistente con el mantenimiento de la temperatura global por debajo de 2 grados centígrados, ubicándose la trayectoria de emisiones globales en un sendero que conduce a un aumento de la temperatura en torno a 2,7 grados centígrados.
Este análisis se constituye, pues, en un elemento de juicio fundamental para entender la magnitud de las reducciones de gases de efecto invernadero que los países se proponen alcanzar y los medios para lograrlo, así como estimar la brecha entre lo que los países ofrecen hacer en materia de mitigación y lo que es necesario lograr si se quiere alcanzar el objetivo de evitar que la temperatura media del planeta se eleve por encima de los 2 grados centígrados.
Es clave, también, pues en ausencia de un acuerdo que establezca un techo a las emisiones, cada país, incluso los países desarrollados, propone realizar esfuerzos según sus circunstancias y posibilidades, en un modelo de acuerdo de abajo hacia arriba, que provoca un nivel de emisiones por encima de lo que hace falta.
Como una parte central de las negociaciones de cara a un nuevo acuerdo climático que debería adoptarse en Paris en diciembre de 2015, la Conferencia de las Partes les había solicitado a los países que son Partes de la Convención que presentaran sus contribuciones nacionalmente determinadas antes del 1 de octubre de 2015.
Así, honrando esa solicitud, al 1° de octubre de 2015, se habían recibido 119 INDC, entre las que se cuenta la de una organización de integración económica regional. En consecuencia, las INDC presentadas incluían las propuestas de 147 Partes de la Convención. Estas propuestas representan aproximadamente a un 75 por ciento de las Partes y suman alrededor de un 86 por ciento de las emisiones globales medidas en el año 2010. Desde entonces, ha habido nuevas presentaciones, y estas ya llegan a 155.
El contenido de las contribuciones varía en muchos aspectos, lo que hace que su ponderación constituya también un desafío, pues esos documentos nacionales son heterogéneos, entre otras cuestiones, en sus modalidades de cálculo, en la manera en la que presentan los datos, en el año de base que proponen, así como en los sectores en los que se enfocan.
Dada la importancia de la cuestión, dedicaremos otras notas a examinar los diferentes análisis que se vienen difundiendo.
Fuente: FCCC/CP/2015/7. Synthesis report on the aggregate effect of the intended nationally determined contributions. Note by the secretariat