El presente artículo forma parte de una serie especial, seleccionada por la Plataforma Finanzas Carbono, y orientada a analizar los avances de las negociaciones de la COP 17 en Durban. Puede acceder a más contenidos especiales sobre la COP 17 en Durban haciendo click AQUÍ.
Por Gerardo Rabinovich
Moderador de la COP-ENE
Plataforma Finanzas Carbono
La AGENCIA INTERNACIONAL DE LA ENERGIA (AIE) tuvo una activa participación en varios eventos de la COP17 haciendo llegar un mensaje contundente: “los gobiernos deben mantener y reforzar sus promesas climáticas”.
Como parte de los estudios que se publican en el World Energy Outlook 2011, presentado el 9 de noviembre pasado, esta Agencia indica que como consecuencia de las débiles promesas realizadas el año pasado en Copenhague el costo de alcanzar los objetivos climáticos propuestos se incrementó a 1 trillón de U$S hasta el año 2035.
Como consecuencia de la ausencia de acuerdos, los costos de reducir las emisiones serán mucho mayores después del año 2020. El nuevo informe de la AIE presenta por primera vez un Nuevo Escenario de Políticas, que asume una “cautelosa” implementación de los acuerdos climáticos y de los eventuales compromisos que se alcancen.
La creciente demanda mundial de combustibles fósiles conducirá a un incremento promedio de las temperaturas del planeta bastante más allá de los 2º C hacia fines de siglo si no se verifica un “fenomenal impulso de políticas” concertadas entre los países del mundo. Aún en este último caso, el nuevo escenario planteado indica que el crecimiento más probable de la temperatura del planeta se ubica en los 3,5 ºC, y en la actual trayectoria de consumo podría superar los 6º C, con las consecuencias que ello implica para el sostenimiento de la vida en el planeta como hoy la conocemos.
Aún implementando los compromisos en curso, la demanda de energía crecerá un 36% hacia el año 2035, impulsada casi íntegramente por el crecimiento de los principales países en desarrollo, no miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
China ya superó a los Estados Unidos como el mayor consumidor de energía mundial en el 2009, y su contribución al crecimiento de la demanda energética mundial ha sido estimado en el 35%.
Los precios del petróleo se aproximarán en promedio a los 113 U$S/barril en el 2035, contra un promedio en 2009 cercano a os 60 U$S/barril, y la producción mundial de petróleo crudo llegará a los 99 millones de barriles/día. De esta forma hacia 2035 el petróleo continuará siendo la principal fuente de energía primaria, seguido por el carbón, aún cuando todos los compromisos de lucha contra el cambio climático fueran cumplidos.
Las energías renovables podrían doblar su actual incidencia en la Oferta Total de energía Primaria, alcanzando el 14% de la demanda energética total en 2035. La energía nuclear por su parte también incrementaría su participación al 8% como resultado del incremento de los precios del petróleo y de políticas específicas de los gobiernos para mejorar la eficiencia energética.
El combustible fósil menos afectado por los esfuerzos de reducir la participación de estos en el abastecimiento mundial y de esta forma también reducir las emisiones de CO2, será el gas natural. Se espera que la demanda de este hidrocarburo se incremente un 44% hasta el año 2035.
El Director Ejecutivo de la AIE, Naburo Tanaka, afirma que el mensaje es claro: “es necesario actuar ya, para asegurar el cumplimiento de los compromisos climáticos, y estos deben ser interpretados de la forma más fuerte posible, mientras que compromisos más fuertes aún todavía deben ser tomados de aquí al año 2020, si no antes. De otra forma el objetivo de no superar los 2º C, como incremento de la temperatura media del planeta hacia fines de este siglo, quedará rápidamente fuera de nuestro alcance en forma irreversible”.
Uno de los temas sobre los cuales la AIE hace especial hincapié es la reducción de los subsidios sobre los combustibles fósiles. Estos alcanzaron a los 312 mil millones de U$S en 2009 y su progresiva desaparición hacia el 2020 permitiría reducir la demanda de petróleo en 4,7 millones de barriles/día.
El economista jefe de la AIE, Fatih Birol, subrayó que, según los estudios realizados por la Agencia, la ventana de los 2º C se cerrará en forma irreversible si no se toman fuertes medidas de inversión en energías renovables de aquí al 2017. Para que ello suceda debe renovarse un acuerdo internacional ya sea en Durban o en las próximas COP.
Los Estados Unidos y China cuentan actualmente con cerca de la mitad de las emisiones de CO2 de nuestro planeta. Si estos dos países no se ponen de acuerdo para alcanzar un acuerdo restrictivo respecto de las emisiones, entonces será muy difícil que se pueda revertir la tendencia observada. Si a ello agregamos a la India, que según las proyecciones de la AIE se convertirá en el mayor tercer país emisor del planeta, entonces nos encontramos frente a un verdadero gran dilema climático.